
El código de barras en una herramienta universalmente conocida y utilizada desde 1970. Sin embargo, las presión existente en las empresas para ser más competitivas a nivel mundial, está llevando a que el RFID cada vez esté teniendo más presencia, y presente un gran crecimiento.
Los sistemas de RFID ofrecen un amplio abanico de aplicaciones para mejorar el control del inventario, trazabilidad y la cadena de suministro.
Quizás el peor enemigo del RFID, son las barreras de entrada típicas de la tecnología, en cuanto a la adaptación por parte del personal. Muchas pymes y medianas empresas, aún viendo los beneficios que pueden llegar a tener, están a la expectativa de lo que hacen los demás actores dentro de su sector. Posponiendo la adopción de estos sistemas.
Sin embargo, que las empresas líderes del sector como el Grupo Inditex, Wal-Mart, Decathlon, El Corte Inglés, Uniqlo, Mango,… hayan apostado firmemente por el RFID, hace que exista una urgencia apremiante para conocer las ventajas y desventajas del RFID frente al código de barras.
Ventajas del RFID sobre el código de barras.
- Capacidad de reescritura. Una etiqueta de RFID puede grabar información varias veces.
- La información escrita en un código de barras no puede ser cambiada, una vez que está impreso.
- No es necesario tener línea de visión directa para su lectura. De hecho, los artículos con etiquetas de RFID pueden ser leídas dentro de su correspondiente embalaje (caja, palet,…).
- Permite la identificación individual de cada producto, pudiento obtener importantes beneficios como conocer una fecha de caducidad, valorar productos a su coste de compra unitario, una gestión del inventario más productiva,…
- Incrementar la distancia de lectura. Las etiquetas RFID pueden ser leídas a mucha más distancia que los códigos de barras. Dependiendo del tipo de frecuencia y equipos de lectura, en entornos logísticos, se pueden hacer lecturas a una distancia máxima de 20 metros.
- Tienen una mayor capacidad para almacenar información.
- Lecturas mútliples, mientras que el código de barras es individual.
- Durabilidad acondicionada a ambientes de trabajo industriales. El RFID puede aguantar en ambientes hostiles como el agua. Mientrás que el código de barras puede ser más facilmente dañado. En aplicaciones como por ejemplo la identificación de los palés retornables, el RFID es una tecnología más apropiada, ya que no requiere de su reemplazo. Los Tags RFID pueden llegar a tener una vida ilimitada.
- Mayor seguridad. La información almacenada en una etiqueta RFID puede estar protegida con contraseña y encriptada. El código de barras no es programable ni se puede proteger.
Ventajas del código de barras sobre el RFID
- La facilidad de impresión, mientras que un RFID necesita de equipamiento especial (PDAs) o impresoras especiales.
- Menor coste unitario por etiqueta. Pero en la operativa global hace que no sea más económico (ya que implicará más retrabajos, gestión de inventario continua, mermas, perdida de venta desconocida,…)
- La gran implantación del código de barras en la mayor parte de los sectores y empresas.
- Interferencia en la lectura de radiofrecuencia ante sistemas líquidos y metal. Para ello las etiquetas deben ser especialmente diseñada para aplicarse sobre esos entornos.

Como se puede apreciar, la balanza se inclina a los mayores beneficios de la tecnología RFID. Sin embargo, no se puede generalizar, ya que hay qu estudiar el ROI (retorno de la inversión) para cada caso concreto.
Pero podemos afirmar, que en la mayor parte de los sectores y empresas existe más beneficios implantando la tecnología RFID que el código de barras. Y ya no hablamos sólo, de la mejora en competitividad mediante el ahorro de costes (evitar venta desconocida, eliminar tareas que no aportan valor, mejorar las compras en base una mejor gestión de tu inventario, ganar en rapidez, reducción de mermas, reducir inventarios,…). Sino otros beneficios como puede ser la trazabilidad, fundamental para empresas de alimentación o sanidad.